Tu sonrisa es para mi el inicio de un sudor perlado que vaga temeroso por mi piel, mi vientre, se encoje y expande aprisionando a esas necias mariposas que sueñan con batir sus alas en tu piel.
Tus ojos, el océano infinito donde flotan galaxias enteras y tus parpados custodios eternos de tu mirar se pasean por el colegio obsequiándole al mundo una belleza radiante.
Mis piernas me fallan, te veo acercarte; mis manos estúpidamente se entrelazan frente a mi y tímidamente agacho la cabeza, pues me da vergüenza que me mires, mis lentes empañados por los calores que me recorren al verte me impiden saber con certeza cuan cerca de mi estas...
Puedo olerte, las rosas y bayas silvestres te impregnan toda y me embriagan hasta tal punto que puedo sentir como humedezco mi ropa con solo percibirlo.
Tu cuerpo sacado de mis mas obscenas fantasías esta justo delante de mi, no puedo mirarte, no me atrevo pues por mi mente están pasando mil imágenes de ti y de mi fundiendo nuestros cuerpos al calor de un beso y exhalando un maravilloso suspiro donde de a poco la vida se nos escapa, imagino mis dedos explorando tu níveo vientre para bajar por tu hermoso monte y así encontrar el jardín místico donde lentamente los pétalos de tu fragante rosa se abren para mi obsequiándome el néctar perfecto de tu piel.
Te amo, te deseo, te anhelo con locura y no quiero renunciar a verte, no quiero que me odies...
por eso guardo celosamente este sentimiento, me conformo con mirarte, ser tu consuelo y apoyo, me satisface nuestra amistad y toda la confianza que me tienes, todas esas noches que dormimos lado a lado contando las estrellas y nuestras penas.
¿sabes? esa noche que fui a tu casa, no pude evitar hurtar de tu cesto de lavado esas dulces pantaletas... si... las de moños rosas... esas que no encuentras... son mi tesoro mas preciado y junto a una foto tuya en clase de natación reposan en el buró de mi cama donde noche a noche tenemos una cita.
Ya estas aquí, frente a mi y como todas las mañanas recibo tu mochila, te acerco las pantuflas de estar en la escuela y con mi voz pausada te saludo.
-Buenos días Ne-san - de un tirón y casi sin aliento, disimulando mi emoción
-Buenos días Ne-chan- Me respondes tiernamente y sacudes mi cabellera con tu angelical mano.
Y nos vamos tomadas de la mano... como dos buenas amigas y mientras yo trato de evitar que mi par de tímidas violetas revienten en mi blusa y, que mi rosa no desprenda toda su miel y mis labios no suspiren pronunciado tu nombre con esta enferma necesidad de ti.
FELIZ DÍA DEL ORGULLO HOMOSEXUAL, LESBICO, BISEXUAL, TRANSGENERO